Que suerte la nuestra!… llegando a cargar combustible en la ciudad de Los Andes, última ciudad “grande” antes del cruce a Argentina, el Chez Móvil empezó a corcobear justo al lado del surtidor… Rápidamente, abortamos la carga de combustible y paramos en el estacionamiento de la estación de servicio. Apagamos el motor, y empezamos las investigaciones de la falla.
Cuestión, que algunas horas mas tardes, luego de haber cambiado el filtro de combustible (mi primer suposición), agotado la batería en el arranque, e intentado varias veces empujar para arrancarla con ayuda de los muy dispuestos playeros, todos los intentos fueron en vano.
Pasamos la noche allí sin muchos miramientos, pensando cual sería la causa del problema… Nuestro apuro por cruzar a Argentina en estos días estaba dado principalmente porque anunciaban muy mal clima en el cruce, y nuestra ventana de buen tiempo se iba a cerrar en un par de días.
Cuando nos disponíamos a dormir, apareció un buen hombre que nos golpeó la ventana. Era un mecánico que había sido contactado por alguno de los playeros! Hablamos un rato, le comenté que lo síntomas desde mi punto de vista, eran de falta de combustible, que habíamos cambiado el filtro, empujado, en fin… todo lo que nos pasó y prometió volver al día siguiente con un electricista, en caso de que el problema lo tuviera el burro de arranque…
Nos fuimos a dormir, y al día siguiente, viendo que el mecánico no venía y luego de contactar a otros viajeros vía Whatsapp, empezamos a hacer otros chequeos… y encontramos el problema!
Aparentemente, esta camioneta (la nuestra particularmente) tenía instalado un pre-filtro que estaba bastante tapado. Lo sacamos, limpiamos y destapamos. Listos para arrancar, no teníamos batería. Pedimos a una camioneta que acababa de parar en la estación de servicio, pero no pudimos cargarla lo suficiente y el dueño del vehículo se tuvo ir. Empujamos la camioneta, pero el sistema de combustible estaba tan vacío, y se ve que algo tapado aún, que no llegaba suficiente combustible.
Cuando se nos estaban agotando las ideas, una camioneta apareció para remolcarnos… era el mecánico! que, si bien cayó algunas horas mas tarde de lo prometido, nos salvó las papas. Nos remolcó y el Chez Móvil arrancó!
Chilu se fue a hacer algunas compras al supermercado más cercano, mientras que yo fui a cargar combustible. La pasé a buscar, y salimos rumbo hacia Argentina…