Y parece que venimos de mal en peor… pero que le hace una mancha más al tigre… 😂 Como no pudimos pasar hacia Penitentes, dormimos una vez más en Uspallata. Y acá nos fuimos cerca de las cabañas donde nos habíamos quedado, pero lo suficientemente lejos de la civilización. Al lado de un río… bueno… se ve que no fue lo suficientemente lejos para que a la mañana nos vinieran a decir que era propiedad privada y que no nos podíamos quedar…
Pero, para colmo de males, el Chez Móvil no quería encender por el frío que estaba haciendo… se ve que el señor que vino a increparnos, al ver nuestra situación, se apiadó un poco de nosotros y se fue sin insistir más… De todas maneras, tampoco nos íbamos a quedar a vivir en ese lugar. Cuestión que el Chez Móvil arrancó y emprendimos el viaje hacia Penitentes.